1997 RECUERDO DEL AMIGO Y PAISANO JOSÉ M.ª SOLER GARCÍA

Recuerdo del amigo y paisano José M.ª Soler García. 

Por ANTONIA UGEDA FUENTES

Como todos los nacidos en nuestra ciudad, yo guardo el grato recuerdo de ella. Tanto más intenso cuanto más alejada me hallo de nuestra Villena. De ahí que venga a recordar a un buen villenense y excelente persona. Sí, se nos fue para siempre un gran hombre, José M.ª Soler. Por estas fechas se ha cumplido un año. Fue el 25 de agosto de 1996, a la edad de noventa años. La triste noticia corrió como una centella y llegó a hasta el rincón más lejano.

Así tuve conocimiento del fallecimiento del buen amigo, del inolvidable paisano. Noticia que, aunque esperada por su avanzada edad, no fue para mí menos dolorosa. Sentí en lo más profundo de mi ser el no poder desplazarme para darle el último adiós. De ahí que sea para mí algo así como una obligación y necesidad hablar, siquiera sea brevemente, del amigo fallecido. No puedo ni debo permanecer en silencio. Tengo que expresar mis sentimientos hacia su persona, ya que fue un hombre de gran corazón. Es bueno recordar las muchas vicisitudes y sacrificios de unos hombres que nunca desmayaron en la tarea de proseguir, en el empeño que, como bien dice en unas líneas gratas y modestas, se esforzó siempre por resaltar los valores de nuestro pueblo. Un villenense que el pueblo se congratuló en rendirle honores por su nobleza, sencillez y caballerosidad.

José M.ª Soler explicando unos detalles acerca del tesoro de Villena a los miembros del Fomento de Turismo

Fue un hombre culto y reflexivo que honró al pueblo de Villena con su semblante acogedor y afable, que impregnó de simpatías a los curiosos que solitarios o en grupo, como pueden ver en la fotografía incluida, llegan al Ayuntamiento para visitar el famoso tesoro que tanto dio que hablar en la época de su descubrimiento: siendo el señor Soler uno de los que más colaboró en la recuperación del mismo.

Fue un hombre bondadoso, destacando su gentil sensibilidad. Por tanto cabe repetir, una vez más, lo mucho que valía este gran villenense.

Tuvo un gran placer este hombre bueno el poder presenciar el aprecio y la estima de todos sus paisanos. Satisfacción le produjo el homenaje merecido que se le rindió reconociendo su buen comportamiento y mérito personal a lo largo de su vida honrosa que valorizaba nuestra tierra y nuestra cultura.

Recuerdo un programa televisivo del 7 de agosto de 1982, tuve la sorpresa de ver en la pantalla la imagen del buen amigo y paisano José Soler, narrando las muchas riquezas que tiene Villena y de los muchos azares de su vida. Habló de muchas cosas que acuden a la mente, el corazón se hincha de gozo y los ojos se llenan de lágrimas. Y fue tanta la alegría que me produjo ver a un paisano de nuestra tierra nativa que la emoción me impulsó a felicitarlo desde este rincón de Badalona. Desde entonces y muy modestamente vengo describiendo vivencias, de nuestras costumbres villeneras y elogios a su persona, que han sido publicadas en la revista anual tan ilustrada por el Departamento de Cultura del Excelentísimo Ayuntamiento de Villena, que con motivo de sus fiestas de Moros y Cristianos se celebran el día cinco de septiembre.

¡Amigo querido Soler: con el recuerdo de sus gratas y sencillas líneas y por todo cuanto valía estará siempre vivo en nuestro corazón!

¡Que la tierra le sea leve, amigo Soler!

Una villenera, desde Badalona (Barcelona).

Extraído de la Revista Villena de 1997