Heráldica y blasones de la nobleza villenense. Por MIGUEL FLOR
«VILLENA, HERMOSA CIUDAD HISPANA CUBIERTA DE BLASONES HISTORICOS»
Este es el título de una película que se rodó en Villena aproximadamente en el año 1925.
Esta película-reportaje, es muy interesante, de la cual pude rescatar varios metros, hace mucho tiempo, pero sobre esto ya hablaré en otro momento, únicamente he querido recordar este título como prólogo del tema que quiero tratar: «La Heráldica, escudos y blasones de la nobleza villenense».
Durante varios años, he intentado recopilar datos y documentos, tanto históricos, facilitados por las propias familias, como gráficos, de escudos en casas o fincas, por todo el territorio de Villena, así como de las poblaciones de Yecla, Cartagena, Murcia y Elche.
En verdad, Villena, tuvo numerosos escudos heráldicos (de los apellidos), encima del dintel de la puerta de sus casas y que lamentablemente, hoy día, se han perdido bastantes de ellos.
Hoy quiero centrarme, en concreto, en un apellido muy significativo e interesante, porque con sus gestas heroicas ennoblecieron a sus familias, a su patria, a su rey, y sobre todo a su pueblo natal, salvaguardando siempre la fe católica, se trata del ilustre capitán D. Juan Martínez de Olivencia.
Los MARTINEZ DE OLIVENCIA (según D. José M. Soler), eran en efecto, personas señaladas en la población. Así vemos a D. Juan Martínez de Olivencia como Alguacil del concejo en 1490, y como Alcalde Ordinario en 1498. D. Sancho Martínez de Olivencia, era Alcalde en 1499, D. Aparicio Martínez de Olivencia, Regidor en 1491, D. Rodrigo Martínez de Olivencia, Mayordomo del Hospital en 1511 y D. Francisco Martínez de Olivencia, hombre versado en letras, encargado por el Consejo para formar parte de la comisión que había de redactar la «Relación de 1575», encargada por el Rey Felipe II, pero el más notable individuo de esta familia, fue sin duda, D. Juan Martínez de Olivencia, hijo de D. Pedro Martínez de Olivencia.
Este preclaro villenense fue capitán militar que se distinguió por su temeridad en el levantamiento del cerco de la isla de Malta.
Esta isla se encontraba sitiada por los turcos, por una escuadra enviada por Solimán II, al mando de Mustafá, compuesta de 159 naves y más de 30.000 hombres. La isla estaba defendida por el gran Maestre llamado Parissot de la Valette. La isla quedaba en gravísima situación, pues estaba defendida sólo por 9.000 malteses, que defendían su fe cristiana y su hogar. La Valette sabía que la caída de la isla suponía la pérdida de una posición de acusada importancia estratégica para la Cristiandad, solicitando, pues, la ayuda a Felipe II.
Según Soler, el virrey de Sicilia D. García de Toledo, envió en 1565 al valeroso capitán Martínez de Olivencia a la isla de Malta, estando sitiada por los turcos, con despachos para el gran Maestre, Parissot de la Vallette, anunciándole el envío de socorros.
El valeroso capitán, pilotando una frágil barquilla de cuero, consiguió entregar los despachos y recorrer el campo del enemigo, del cual levantó planos, tomando nota de las naves y poder enemigo, facilitando el desembarco de la gente prometida por el gran Maestre, y evitando así la invasión turca, que más tarde Felipe II, al servicio de una política católica e imperial, doblegaría al poder turco, en la memorable batalla de Lepanto, pero recordemos y conozcamos concretamente la hazaña de aquel valiente capitán villenense, leyendo unas líneas de la Carta de Privilegio otorgada por el Rey Felipe II, y despachada en Aranjuez el 20 de octubre de 1567 y dice:
«Por cuanto parte de vos, el capitán Juan Martínez de Olivencia, nos ha sido hecha relación que vos nos aveys servido en diversas jornadas, y especialmente el año de sessenta y cinco, estando cercada la ciudad y Isla de Malta de la Armada del turco enemigo de nuestra Santa Fe Católica, D. García de Toledo, nuestro Capitán General y Viso Rey de Sicilia, os embió con despachos al Gran Maestre tres vezez: lo cual hicisteis con manifiesto peligro de vuestra persona y vida, y entrastes en la dicha Ciudad de Malta y reconocistes el campo en el enemigo traiendo la plataforma de el sitio y batería y muy buena relación de él. Y hicistes desembarcar la gente que fue con el socorro, y estuvistes en la isla del Gozo trece días á la punta que descubre á Malta y el puerto de Marco Mureto, donde estuvo la dicha Armada turquesa, reconociendo si salía para ver qué derrota, tomaba passando todas las noches á la otra punta que estava á la otra parte de Çicilia á hacer un fuego de seguro a nuestra Armada, y como se hizo y fué socorrida la dicha Isla y dejada de el turco. De todo lo cual havemos sido informados por Cartas del gran Maestre y el dicho Don García, que nos han escrito sobre ello, y cómo con una barquilla de cuero de buey, entrávades y salíades en la dicha Isla de Malta.
Por ella, el Rey, conocedor de los hechos heroicos de sus soldados, conoce acrecentar el escudo de armas con un "monte y fuego y la barquilla conque nos servistes en la dicha jornada", "teniendo consideración a lo suso dicho, y porque quede de ello memoria a vuestros descendientes"».
Este escudo puede verse aún hoy en el dintel de la puerta de una antigua casona de la calle de San Antón.
Cuenta la tradición, que al regreso de sus empresas guerreras al servicio de España, Juan Martínez de Olivencia, en acción de gracias, depositó en las paredes del Santuario de nuestra patrona, la Virgen de las Virtudes, banderas, estandartes y reliquias. Y entre estos exvotos, la débil bar- quilla de cuero de buey quedó suspendida de las bóvedas del templo.
D. Gaspar Archent, en su «Romancero Villenense», recuerda...:
«El Rey Felipe II
conoció la heroica hazaña
del ilustre villenense
y a Martínez de Olivencia
le concedió que a sus armas
que era en campo encarnado
dos bellas torres de plata
diez quines, y encima de ellos
una cabeza de vaca,
pudiese agregar también
como merecida gracia
un montecillo con fuego
y a más la pequeña barca
que simbolice la otra
de la gloriosa jornada».
También es muy interesante destacar, que Villena, tuvo apellidos en diversas épocas, de muy alta nobleza y notoriedad, y que sus descendientes, hoy día, conservan con el mayor respeto y orgullo.
Los Mergelinas, los Selvas y los Fernández de Palencia, son ejemplos de un linaje de gran notoriedad y grandeza, por sus aportaciones en hazañas heroicas y servicios distinguidos hechos para la Patria y el Rey y su alcurnia y grandeza fue reflejado en sus escudos y sellos familiares, siendo muy importantes en sus Alianzas ilustres con principales e ilustres familias del reino, como Pérez Medina, Gasque, López de Oliver, Mellinas, Muñoz de Orellana, los Colomer, Cervera, Llorens, etc. Y como queda descrito en los cuadros genealógicos siguientes:
Apellido Selva
Origen: según el Licenciado Francisco Cascales en su obra titulada «Discursos históricos de la ciudad de Murcia», impreso en 1 6 1 4, dice «Los Selva de Murcia, traen su origen de la ciudad de Villena, donde vinieron con título de Caballeros hijosdalgo...».
Escudo: partido en palo. El cuartel izquierdo dos matas escoba y buey paciendo. El derecho mata alta de escoba. Ambos sobre fondo de oro.
Martín Selva casó con Antonia Estevan de Villena.
Diego de Selva casó con Catalina Pérez Medina.
Juan de Selva casó con María de Mergelina y Zuazo.
Cristóbal de Selva (Alguacil Mayor por el Estado Noble de Villena) casó con Antonia Spuche
Cristóbal de Selva casó con Angela de Selva.
Cristóbal de Selva (Regidor Perpetuo por el E. Noble) casó con Luisa Gasque Mergelina.
Cristóbal de Selva (Alcalde de la S. Hermandad por E.N.) casó con Magdalena de Mergelina.
José Selva casó con Isabel Selva y Selva. Diego Pascual Selva casó con Ana Puig.
José M. Selva casó con Ana Antonia López de Oliver.
Rafael Selva y López de Oliver casó con Patrocinio Mergelina Selva.
D. Enrique Selva Mergelina López de Oliver y Selva casó con D.' Trinidad Mergelina Llorens.
Apellido MERGELINA
Origen probable: Rotón príncipe francés, Conde de Ausperche, casó a su hija D.ª Mergelina con D. García Ramires, hijo de D. Sancho de Navarra.
Escudo: partido en palo, cuartel izquierdo tres lises en oro sobre campo rojo. Derecho león rampante en rojo sobre campo de oro.
Fernando de Mergelina casó con Juana Gasque.
Juan de Mergelina casó con Catalina Mellinas.
Luis de Mergelina casó con Luisa Gasque y Medina.
Luis de Mergelina y Gasque casó con Leonor de Miño.
Cristóbal de Mergelina casó con Angela de la Mota.
Luis Antonio de Mergelina (Caballero de Montesa, corregidor de Valencia y superintendente de los Reinos de Valencia y Murcia) casó con Catalina Núñez de Orellana.
Cristóbal de Mergelina (Caballero de Santiago) casó con Juana Soriano Bernal de la Selva.
Joaquín de Mergelina (Caballero de Calatrava) casó con Úrsula Pando Galino.
Cristóbal de Mergelina casó con Josefa de Colomer (Marquesa de Colomer).
Joaquín de Mergelina (Marqués de Mergelina) casó con Ana M.ª Cervera Alburquerque.
Trinidad de Mergelina Cervera Colomer y Alburquerque (Caballero de Malta) casó con Juana Llorens Bayer Chiva y Segarra.
D.' Trinidad Mergelina Llorens Cervera y Bayer casó con D. Enrique Selva Mergelina López de Oliver y Selva.
El linaje de los MERGELINAS, tuvo su primitivo solar en Tudela de Navarra; desde donde pasaron a la conquista del reino de Valencia.
Constituye una familia de hidalgos, afincada en Villena, a la que los Reyes Católicos, el año 1476, y desde Medina del Campo concedieron privilegio de Nobleza. Una rama se estableció en Murcia.
Apellido FERNANDEZ DE PALENCIA
Este apellido y blasón (según me comunica D. Juan Fernández de Palencia y Roc) es uno de los más antiguos de Castilla y León. Se sabe que D. Fernando de Palencia intervino en la conquista de Toledo el 25 de mayo de 1085, acompañando a Alfonso VI, Rey de Castilla y León.
El hijo de D. Fernando Fernández de Palencia fue a la 1.ª Cruzada en 1095-1099 en la que se tomó Jerusalén».
Johan Fernández de Palencia, uno de los comprendidos en la cédula del perdón de los Reyes Católicos, sus hermanos Martín y Alfonso y su padre Pero Fernández de Palencia, también comprendidos en ella. «Catalina Fernández de Palencia, esposa de D. Laurencio López de Oliver, descendiente como los demás, de un famoso capitán que pasó desde Palencia a las conquistas de Valencia y Murcia, y se radicó en esta ciudad de Villena. En memoria suya, y para distintivo de otras familias del mismo apellido de Fernández, muy distinguida también que hay en ella se han llamado siempre Fernández de Palencia los descendientes de aquel capitán, y como uno de estos la citada D.ª Catalina, como también D.ª Isabel Fernández de Palencia, que fue bisabuela de D. Juan López Piñero Fernández de Palencia, uno de los más sabios y grandes prelados de su tiempo».
Sus armas
Escudo cuartelado: en campo de azur, 1.º y 4.º un castillo de oro y 2.º y 3.º escudo jaquelado de quince piezas, ocho de oro y siete de veros. Bordura de Gules con ocho flores de lis de oro.
Y como timbre: celada mirando de frente (por especial privilegio) con una estrella de ocho puntas en oro, puesta sobre su penacho.
Por tanto, quiero aprovechar para agradecer a D. Juan Fernández de Palencia y Roc, Dr. Ingeniero Naval, a la familia de D. Pascasio Arenas López, así como a D. Ramón Campos y familia, a D. Vicente Valdés (q.e.p.d.), a D. Jaime Selva Colomer de Lorenzo y Mergelina, y, cómo no, a la fuente inagotable que es D. José María Soler, a todos por proporcionarme inestimables datos para este cometido.
BIBLIOGRAFIA
«La Relación de Villena de 1575» y «Notables e Ilustres de Villena», de D. José María Soler.
Copia de un documento de D. Josef López de Oliver proporcionado por el P. Francisco Hernández Menor S.J.
«Martínez de Olivencia» (artículo de Martín Menor). «Romancero Villenense», de D. Gaspar Archent.
«Esbozos genealógicos y nobiliarios», de Ernesto Hurtado.
Extraído de la Revista Villena de 1995
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