A SOLI
Quiso alcanzar las estrellas
que habían en su universo
con sus ilusiones desbordadas
vivió sus pequeños sueños.
Fue amigo de Antonio Navarro Santafé
juntos conversaban y pescaban
y hasta el día que Antonio nos dejó
esa amistad viva estaba.
En unas de sus cartas le dijo esto:
a Solimán el Magnifico
fotógrafo de la Torreada de Villena
que Alá te guarde hermano.
También quiso grabar en sus fotos
para darle vida a unos recuerdos
esos lugares donde estuvo Chapí
en la finca Garrincho componiendo.
Muy pocos han podido estar
donde escribió Margarita la Tornera el maestro
en esa casa de Garrincho
quizás él ya estaba enfermo.
En esa casa labor después restaurada
junto al busto de D. Ruperto Chapí
otro busto le acompaña
el de su amigo Azorín.
Soli, un fotógrafo bohemio
quiso dar vida a sus sueños
y con sus cámaras fotografió
esos lugares donde escribía el maestro.
Esa cueva de arena, fresca en verano
ese asiento bajo de un pino ya destruido por el tiempo
esa aljibe con su árbol que le daba sombra
después ese mirador con los bustos de esos dos grandes maestros.
También a otros Villeneros
de la Villena de otros tiempos
quiso Soli con sus fotos
que no nos olvidáramos de ellos.
También plasmo en sus fotografías
esa Villena de antaño
con sus casas y sus calles
y como hoy a cambiado.
Hay de lo que fue la Colonia de Santa Eulalia
a la Colonia que hoy vemos
con una historia callada
que muchos no conocemos.
Soli en sus libros plasmo
sus fotos para el recuerdos
de ese Teatro que allí había
su estación y su estafeta de correos.
Con su fábrica de harina
también tenía su almazara
bodega para sus vinos
su palacio que envidiaba.
También tenía su merendero
entre un jardín construido
con su belleza de antes
con unos lujos distintos.
Soli también publico en sus libros
nuestros montes y nuestros valles
y nuestras casas de campo
y las nevadas de antes.
Cuanta añoranza en sus libros
cuantos recuerdos olvidados
como ese tren de vía estrecha
que el Chicharra le llamábamos.
Pero poco a poco todo envejece
también ha envejecido su autor
de esos libros de recuerdos
que Soli un día escribió.
Que habrán sido de esas nubes de ilusiones
que él conocía sus cuerpos
sabían cómo se llamaban
y sus consecuencias luego.
Pero los años nos traen la vejez
y se llevan nuestra juventud
hoy sigue siendo Bohemio
pero mermado de salud.
Sus recuerdos le dan vida
también ganas de llorar
añorando su juventud
que ya nunca volverá.
Miguel Estevan Pérez
1 comentario:
Estoy totalmente de cuerdo con Miguel Soli era una gran persona Amigo de todo el mundo, pero no hay que olvidarse de MIGUEL con mayúsculas, persona sabia donde las haya y humilde, al que tengo el honor de ser su amigo i gual que lo fui de Pepe. un abrazo muy grande
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