SALUDA DEL ALCALDE
Somos un año más viejos, y en este período de tiempo transcurrido entre Septiembre del 84 y Agosto del 85, nos habrán ocurrido diversas cosas: quizás tengamos un hijo, quizás nuestro estado civil haya cambiado, quizás nos encontramos sin trabajo, quizás nos salpicó alguna desgracia...
Es la vida: cruda, difícil, afortunada y, en ocasiones, amarga. Con todo este cúmulo de sabores y sinsabores nos encontramos, un año más, dispuestos a celebrar unas nuevas Fiestas Patronales. Si nuestra vida no es una «Fiesta» no debería ser fácil predisponernos para celebrarla, pero esa mágica transformación que nos acontece a todos, un año más va a ser realidad. Olvidamos casi todo, y nos lanzamos a la aventura por unos días, que si no más alegres al menos nos dan esa sensación, y esto es lo verdaderamente importante.
Villena no es la misma de siempre, su paz y su tranquilidad se ven invadidos por la luz, el color, el ruido, en definitiva, la alegría.
Es la vida: cruda, difícil, afortunada y, en ocasiones, amarga. Con todo este cúmulo de sabores y sinsabores nos encontramos, un año más, dispuestos a celebrar unas nuevas Fiestas Patronales. Si nuestra vida no es una «Fiesta» no debería ser fácil predisponernos para celebrarla, pero esa mágica transformación que nos acontece a todos, un año más va a ser realidad. Olvidamos casi todo, y nos lanzamos a la aventura por unos días, que si no más alegres al menos nos dan esa sensación, y esto es lo verdaderamente importante.
Villena no es la misma de siempre, su paz y su tranquilidad se ven invadidos por la luz, el color, el ruido, en definitiva, la alegría.
Yo como un ciudadano más, es accesorio y temporal ser Alcalde, también voy a participar en esa alegría colectiva, y desde estas páginas aprovecho la ocasión para desearos ¡Felices Fiestas!
El Alcalde - SALVADOR MULLOR MENOR
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