3 may 2024

1955 VISIÓN PATERNA

VISION PATERNA, Por Juan Mañas. Párroco Arcipreste.
ES tarea harto difícil querer expresar mis sentimientos sinceros y cordiales en un tema tan apa­sionado como Villena. Y es difícil porque no tiene cabida en mí el desapasionamiento y el juicio objetivo y sereno. Yo he de pecar siempre de apasionado. Porque yo veo y siento a Villena desde mi altura paternal -padre-, por tantos años de párroco en esta Ciudad. Y ese sentimiento paterno, del que no puedo prescindir ni evadirme, me coloca en la tesitura de los padres: o sea, que nada ve en sus hi­jos que pueda resultar pobre, feo o malo; por el contrario, todo le parece espléndido, bello y virtuoso.
Si a ese innato sentimiento mío, añadís la verdad, entonces mi comentario ha de ser loa jubilosa, piropo encendido y panegírico apasionado. Porque la verdad -aparte de mi ceguera paterna- es que Villena alcanza cimas de singularidad única. Y para probarlo, no habré necesidad ni de espigar en las áureas páginas de su historia, ni volcar mi fantasía ahondando en sus bellas tradiciones, ni siquiera cargar de colores mi paleta para pintar la maravilla de su vega, bello y ubérrimo cañamazo que el esforzado trabajo de sus hijos convirtió en maravilloso vergel.
Me bastaría para decir mi sentida verdad sobre la grandeza de Villena, hablar de su tradicional religiosidad, que tiene su prueba más palpable en la maravillosa mole de su Arciprestal, la iglesia de Santiago. Esa soberbia fábrica canta a los siglos la verdad de la piedad cristiana de la antigua Villena. Y su permanencia y su casi renovado ornato, porque todavía hay mucho que hacer, hablan muy alto también de la piedad de la actual Villena. Perennemente, sus retorcidas columnas -que son rareza insig­ne y belleza impar de su gótico- son el símbolo de las espirales de oración y piedad que Villena ofrenda a Dios por medio de esa joya de su devoción que es su Madre, la Santísima Virgen de las Virtudes. Y al centrar en su Templo y en su Patrona toda la sublimidad de Villena, para mí -como Sacerdote y Párroco- alabo también la fe y la práctica piadosa de mis feligreses y de todos los vecinos de esta bella y simpática Ciudad, a todos los cuales, aun a los más tibios y en parte alejados del cumplimiento religioso, envío mi corazón esperando con la idea de que ese fervor que todos sienten -¡y ahí sí que hay unanimidad!- por su Virgen Morena, será la fibra íntima y delicadísima que Dios pulsará a su hora; será la crispa providencial con que el Señor encenderá sus almas para la vida y para la muerte.
Que si Villena es única y señera en los sectores agrícola, industrial y comercial; que si Villena tie­ne aire de abolengo y señorío, de aristocracia y blasones; que si Villena ofrece una fisonomía de ciudad moderna y progresiva... para este corazón mío, sacerdotal y paterno, Villena es más grande y más her­mosa por su fe, por su devoción a la Patrona y su tradicional y sentida religiosidad.
Revista Villena 1955
Cedida por... Elia Estevan.

No hay comentarios:

..... CONTINUAR... PASAR PÁGINA Pinchar en... (entradas antiguas)
Esta Web no se hace responsable de las opiniones de sus lectores. Todo el contenido es público. Usted puede copiar y distribuir o comunicar públicamente esta obra siempre y cuando se indique la procedencia del contenido. No puede utilizar esta obra para fines comerciales o generar una nueva a partir de esta..
Web: www.villenacuentame.com
E-Mail:
villenacuentame@gmail.com