En 1521 estalla en el Reino de Valencia la llamada Guerra de las Germanías, donde varias ciudades de este reino se negaron a reconocer la autoridad del Emperador Carlos V. Fruto de este malestar muchos huyeron de las ciudades rebeldes siendo Villena el lugar de acogida de estos refugiados.
Más tarde un ejército al mando del Virrey de Valencia, Don Diego de Mendoza, se enfrenta a los rebeldes en Gandía donde será derrotado y su ejército dispersado. Una vez más Villena recogió a todas las tropas del Virrey que huían de la derrota. Ante la falta de dinero, los mercenarios del Virrey montaron en cólera y reclamaron su paga pero poco pudieron hacer, ya que tanto la artillería como los hombres del Virrey estaban bien resguardados tras los muros de Villena.
El Emperador mandó el dinero necesario y las tropas del Virrey de Valencia se reorganizaron en Villena para lanzar una nueva ofensiva. Los de Villena pusieron su experiencia en la guerra de fronteras al servicio del Virrey y fueron capaces de socorrer Albaida y de recobrar Xátiva y Alzira, además de proporcionar todas las provisiones necesarias para esta campaña.
Por todo ello el Emperador Carlos V le concedió a Villena el título de ciudad el 25 de febrero de 1525.
Fe de erratas: Diego Hurtado de Mendoza y Germana de Foix no eran marido y mujer. Ambos fueron Virreyes de Valencia en periodos de tiempo diferentes.
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