Restaurado el frontón del cementerio
La concejala de Cementerio ha anunciado la restauración del frontón del cementerio “antiguo” de Villena, el cual data de 1880 y se encontraba en muy mal estado de conservación y con peligro de desprendimientos.
La edil de Cementerio, Paula García, ha comunicado esta mañana la finalización de las obras de rehabilitación del frontón del cementerio “antiguo” de Villena. Las obras han sido realizadas por el restaurador local José Luis Sáez durante el presente mes de noviembre.
El restaurador ha destacado el mal estado de conservación de la pieza, la cual data del año 1880. Al parecer en los 136 años de vida del cementerio nunca se habían llevado a cabo obras de mantenimiento o rehabilitación del frontón de la fachada. Tan sólo se tiene constancia de un pequeño enfoscado en la parte trasera, a finales de la década de los 90.
La intervención realizada ha consistido inicialmente en la limpieza y desinfección general del conjunto por medios mecánicos y la aplicación de desinfectantes específicos, con el máximo respeto por la superficie original, al mismo tiempo que se iba retirando el mortero de yeso deteriorado. Tras ello se colocó la pieza desplazada que sufría riesgo de desplome, se colmataron las juntas con un mortero de cal hidráulica con sílice y caliza para finalizar con una veladura protectora para homogeneizar las tonalidades y proteger la superficie de la piedra.
“Es una actuación más dentro de la línea de conservación y mejora del cementerio a través de pequeñas acciones”, ha destacado la edil. En las semanas anteriores se colocó un panel informativo a la entrada del cementerio con un itinerario marcado con las principales esculturas fúnebres allí existentes.
Por otro lado la concejala ha anunciado que esta semana se han abierto los sobres para la concesión de las obras de construcción de 240 nuevos nichos y la urbanización anexa a los mismos. Las obras han sido adjudicadas a la oferta económica más ventajosa, la cual pertenece a una empresa villenense, por un importe total de 105.000 euros más IVA.
Restauración del frontón del cementerio de Villena (1880)
24 noviembre, 2016 | José Luis Sáez Iñiguez
Entre los días 7 y 21 de noviembre del presente 2016 se ha llevado a cabo la restauración del frontón sobre cornisa que corona el primer acceso al cementerio municipal de Villena. Se trata del elemento más representativo de la fachada principal del recinto primigenio y presenta la inscripción “AÑO 1880” en el tímpano, año de inauguración del mismo.
Está construido mediante grandes piezas de piedra caliza local recibidas con mortero de cal en la cornisa y con mortero de yeso en los bloques inclinados del frontón. Como remate en la parte superior se alza una cruz de piedra “Almorquí” que por sus características y estado de conservación, pudo ser añadida en la segunda mitad del siglo pasado, en sustitución de una cruz anterior.
Consideramos que el deterioro natural del mortero de yeso y la falta de un mantenimiento adecuado a lo largo de sus 136 años de existencia, han sido factores determinantes sobre el alarmante estado de conservación que mostraba. En primer término, la construcción presentaba abundantes depósitos de polvo y suciedad, así como una extraordinaria proliferación biológica concentrada en los planos superiores. Por su parte, el deterioro prolongado de las juntas de yeso había permitido la infiltración de agua de lluvia y su acumulación continuada en el interior de la obra dando lugar al desplazamiento con evidente riesgo de desplome de una de las piezas de la cumbre y a una fuerte erosión y exfoliación del material pétreo, muy avanzada en los extremos de la cornisa inferior.
Durante los trabajos, y gracias a una moneda incrustada en el mortero (5 ptas. 1996), hemos constatado una intervención realizada a finales de los años 90 del siglo XX consistente en el enfoscado de la parte trasera del conjunto y la colmatación parcial de juntas en los planos superiores mediante mortero de cemento gris. Una intervención de urgencia, a todas luces insuficiente.
La intervención realizada ha consistido inicialmente en la limpieza y desinfección general del conjunto por medios mecánicos y aplicación de desinfectantes específicos, con el máximo respeto por la superficie original, al tiempo que se iba retirando el mortero de yeso deteriorado. Una vez limpia la superficie, se aplicó un consolidante específico por impregnación en las zonas que presentaban descohesión. A continuación se procedió a recolocar la pieza desplazada a su posición original para seguidamente colmatar las juntas mediante un mortero de cal hidráulica con carga de sílice y caliza, también empleado en la reintegración de los volúmenes perdidos o extremadamente pulverulentos. Por último, como tratamiento protector y cromático, se han aplicado distintas veladuras para homogeneizar las tonalidades y proteger la superficie pétrea sin reducir considerablemente la traspiración natural propia de la piedra caliza.
Si bien los trabajos realizados han devuelto la cohesión al elemento, que ahora se muestra en todo su esplendor, sería conveniente añadir una cubierta plana con goterón que evitara la incidencia directa de la lluvia y la acumulación de humedad sobre el conjunto. La superficie irregular de los planos superiores es muy propensa a la absorción de agua y a la proliferación de briofitas (musgo). Esta sencilla protección garantizaría una buena conservación del elemento durante décadas.
Foto-álbum:
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