16 retratos en Villena Medieval
Hace un par de semanas, Villena se transformó durante tres días en una ciudad de la Edad Media para celebrar las “Fiestas del Medievo”.
El énfasis en todas las conversaciones de los días antes de ir era la implicación de los Villenenses, pues qué mejor que contar esta fiesta con retratos.
Ninguno de los fotografiados en este post no son actores, son las gentes de Villena. La localidad alicantina acoge desde hace 14 años, del 6 al 8 de Marzo, esta fiesta medieval.
Durante un intenso fin de semana, sus calles se llenan de mercados, bodas, combates medievales y muchas ganas de pasarlo bien.
Las autoridades son las primeras que disfrutan de las fiestas. En esta foto, en la sala de plenos del ayuntamiento, el alcalde Javier Esquembre junto a sus concejales y el presidente de la Asociación de El Rabal.
Las gentes esperan ansiosas el pistoletazo de salida. La plaza se llama de Santiago, estos señores sí que saben.
El viernes por la noche a eso de las 20:30 horas, y después de la llegada de los Reyes Católicos, da comienzo la fiesta medieval.
Visita obligada al campanario de Santa María.
El camarero de la bodega del Caracol, un lugar público al que hay que ir. Tiene estancias decoradas en las que te adentras al Medievo sin ser consciente.
El señor que repone las bebidas en la bodega Caracol.
Una de las estancias mágicas de la bodega Caracol.
En las puertas de la bodega, estaba esta bella dama. Parece ser que dentro había un hospital. Falta le hacía.
Entre bromas a los pies del castillo.
Visita teatralizada al castillo, los actores no lo son tanto, pues son Villenenses.
A esta señora tendrían que darle un Oscar. Me hizo salir con muy mal cuerpo de la visita “teatralizada” al castillo, y no fui el único, algún acompañante hasta lloró.
Esta sonrisa es después de pelearse y ganar el combate medieval de la Atalaya. Los participantes en esta lucha pertenecen a la Liga Oficial de Combate Medieval y los golpes son en serio. En cuestión de minutos se dan caña, hasta que alguno cae al suelo.
Estos dos paisanos eran muy divertidos. Mira cómo se lo pasaron en la visita al castillo.
Momentos antes de comenzar la procesión de las antorchas, es bueno compartir lumbre.
Los Doctores de la Peste eran de los más genuinos.
No hay nada como mirar con los ojos de un niño esta gran fiesta medieval. ¿No te parece?
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