2014 ES UN ORGULLO SER PREGONERO DE MI CIUDAD

Antonio Ferriz: "Es un orgullo ser pregonero en mi ciudad"

Este ilustre compositor será el encargado de dar el pregón de las fiestas de Moros y Cristianos 2014. Este galardonado músico de 73 años ve de esta manera cumplido "un sueño como villenero"

Antonio Ferriz Muñoz cuenta con más de 80 obras compuestas, "aunque algunas no son audibles y se han quedado en el archivo guardadas", apunta. No obstante, las tres más significativas son "Los cabos de Villena", "Las calles de mi Villena" y "Duende de España".

Si hay una obra de la que el maestro presuma y viaje en el tiempo para recordarla esa es, sin duda, "Las calles de mi Villena". Contó cómo se fraguó esa composición: "La escribí con 8 o 10 años. Con 15 la retoqué y me di cuenta de que desde el primer compás hasta el último estaba matemáticamente perfecta. Años más tarde, cuando cursaba segundo de solfeo le entregué al maestro Carrascosa la composición y éste me hizo subir al estrado y dirigir yo mismo a la banda. Aquella noche, la Plaza de Santiago se me quedó pequeña".

Para el compositor, nunca se le había pasado por la cabeza "ser pregonero. Villena se ha portado, y se porta conmigo enormemente". Con el brillo en sus ojos, Ferriz siguió recorriendo su pasado. "Si ya me sorprendió cuando le pusieron una calle a Villena con mi nombre, imaginaros cuando me comunicaron que iba a ser pregonero. Estas son mis raíces"

Ferriz admitió que "muchas veces la gente mayor estamos infravalorados", al tiempo que destacó: "Nací con la música en mis venas. Mis padres querían que yo fuera músico profesional. Mi padre quería ver reflejado en mí lo que él no pudo ser".

Texto... Francisco Puente García

Querido Antonio...

Antonio, Antonio, si tú buen padre te viera, con esos ojos que tenia pequeños, pero de águila muy fina, cuantos días comentamos tus estudios de música, junto a tu hermano Juanin, en la casita cercana a las Cruces con su buen amigo viendo a los verderoles, canarios y jilgueros, como bebían agua de una pequeña balsa o charca, de agua artificial o trajinando y faenando en tu casa, en los zapatos como grandes artesanos del gremio, como te iban por esas tierras fuera de la Patria Chica, de nuestra querida tierra de Villena.-

Me unió una grata amistad con tu querida familia, que en paz descansen, hoy desaparecida como tantos otros villeneros, yo empecé a trabajar en la misma empresa que trabajaba tu padre a los catorce años de edad hasta los veinte que me fui voluntario a la Agrupación de Banderas Paracaidistas del Ejecito de Tierra y fueron seis años que no pasaba día que no fuéramos juntos al trabajo o de vuelta, recuerdo la inmensa cantidad de chistes que a diario nos enseñaba a cual más gracioso y desenfadado.

Como también recuerdo esa veladas veraniegas al finalizar las largas horas de Sol ardiente y abrasador de entonces estando reunidos coma casi siempre los fines de semana sábados o domingos, los vecinos se juntaban con sus sillas a la puerta de sus casas y el vino de bota o porrón no paraba de dar vueltas, con esas habas muy bien condimentadas con menta y un poco de pimienta y sal, altramuces, cacahuetes y torraos no faltaban a ese acompañamiento tan armonioso que tu querido padre Antonio, conocido como “El Pianista” con su querido acordeón nos deleitaba con su música y se armaba el bailoteo de parejas jóvenes y de mayores también otros en coro cantábamos la canción y así despedíamos un día más de la semana muy felices y contentos de trabajar de lunes a sábados incluidos , otros también los domingos.

A tu cuñada Pepa, la veo muy a lo lejos también hermana de Pepe Compañ, este un gran amigo por cierto también un buen Caballero Legionario, que juntos con tu hermano Juanin, jugábamos de jóvenes al futbol en la Celada, con esos campeonatos de empresas entre otros como a tus sobrinos de la familia Cerraña, hoy también somos vecinos como lo fuéramos entonces, yo vivía en la Calle Carpena y nos acordamos mucho de esa época, que por un motivo o por otro siempre sale a relucir esa época feliz de la vida, que como todo tiene su contratiempo bueno o menos bueno pero mantendremos en nuestro pensamientos a los que nos hicieron felices en otras fechas ya pasadas del calendario.

A ver si tenemos ocasión y podemos por lo menos, yo saludarte me haría mucha ilusión ya que por un motivo o por otro no hemos coincidido en fechas y si te he visto alguna vez en tu casa cuando venias a lo largo. Yo tengo también setenta y dos años y somos de la misma quinta casi, por un año…

Recibe un fuerte abrazo de este amigo, que te aprecia y también te admira, como al amigo Paco Solves, Villenero de casta, de los pies a la cabeza, autor y compositor de Villena de mis amores.

Por Francisco Puente-García